26 de julho de 2012

Incas - Los Hijos del Sol

Templo del Sol 

Los incas fueron una gran civilización que surgió por vuelta del siglo X y tuvo su fin en el siglo XVI, con la dominación de los españoles. Su imperio incluía regiones del norte de Ecuador, del sur de Colombia, del noroeste de Argentina y del norte de Chile, además de todo el Perú y Bolivia. La capital del imperio era Cuzco, que en su idioma - el quechua – significa “Ombligo del Mundo”. Diferentemente de la Isla de Pascua, ese significado no le fue atribuido por estar en uno de los lugares más aislados del mundo, pero sí, según el profesor e investigador Henri Favre, por ser el lugar de donde “el imperador ordenaba el caos para transformarlo en cosmos”.  

Territorio Inca

Las familias incas eran llamadas ayllus. Los hombres eran responsables por la agricultura, cerámica y otras actividades artesanales, como la hilandería (técnica de hilar materias textiles). Las mujeres tenían las tareas generales de la casa, como cocinar y también hilar. Las responsabilidades de los niños empezaban a los dos años de edad, cuando ya no eran más considerados niños y hacían tareas en la casa, además de cuidar de la ganadería.

El arte de la hilandería

Los ayllus tenían un jefe llamado kuraka. El kuraka distribuía la tierra, organizaba los trabajos colectivos y hacía la intermediación cuando había conflictos entre los habitantes de la provincia. A cada ayllu les era dado un lote de tierra suficiente para su subsistencia, y los hombres, además de trabajar en el cultivo de su propia tierra, también lo hacían en las tierras de los kurakas, de los viejos enfermos y de las mujeres viudas. Ayudaban también en la construcción de casas para parejas recién formadas. A pesar de ese tipo de organización parecerse al sistema socialista, no era más que la necesidad de solidariedad entre los habitantes del Imperio Inca. 

Antes de casarse, cada pareja pasaba por un periodo de cohabitación  - con vigilancia de sus padres - para que se testase su compatibilidad. El divorcio no existía – la separación de las parejas solo era permitida por motivos muy graves. Como regla general, se practicaba la monogamia, pero algunos de los hombres de status superior tenían muchas esposas.

Ninõs Incas

Una de sus divinidades era la waka, un espirito que “vivía” en una montaña cerca de donde quedaban sus casas y a ella se le rendía culto en un lugar donde había un árbol, una fuente o una roca, para que hiciese crecer el gado y se garantizase la cosecha. Los muertos eran sepultados en las fisuras rocosas de esa montaña sagrada, pero solamente a los descendentes directos del mismo sexo les era permitido hacer el entierro - los hijos enterraban a sus padres y las hijas, a sus madres. 

De los catorce gobernantes, se dice que Pachacútec (o Pachakuti) – rey Inca en el siglo XV – fue el mayor de todos, pues fue durante su gobierno que el imperio Inca tuvo su extraordinaria expansión por casi toda América del Sur. Fue él quien ordenó la reconstrucción de Cuzco, implantando una extensa red de comunicación, además de crear un fuerte ejército y un sistema de burocracia con el cual logró realizar una gran administración de las provincias.


Llama 
Las batallas y guerras, así como en los imperios Azteca y Maya eran frecuentes, pero la mayor parte de ellas se hacía con fines de conquista territorial y los incas respetaban la cultura de los pueblos conquistados, les permitiendo usar su lengua nativa – desde que usasen el quechua como lengua principal. A pesar de considerados menos violentos que los mayas, los incas trataban sus enemigos con gran crueldad. Cuando capturados, los jefes enemigos eran traídos a la capital y lanzados a los pies del imperador. Después, eran decapitados y con sus cráneos se hacían vasos para bebidas. Con sus huesos eran hechas flautas, con los dientes se hacían collares y su piel se la usaba para la confección de tambores. Sin embargo, esa costumbre no era solo de los Incas, sino de los siglos en que vivieron.

El maíz, además de fuente de alimento, era usado para hacer cerveza (ashwa), consumida en fiestas y celebraciones. Algunos de los incas la consumían en grandes cuantidades para llegar a un estado de transe místico. También hacían harina de maíz (sanku), usada en la composición de ofrendas y sacrificios con llamas o alpacas. De las alpacas también se aprovechaba la lana para la confección de ropas. Las llamas servían para el transporte de carga, su piel era usada en la fabricación de bolsos, con sus huesos se confeccionaban utensilios diversos y su carne era consumida en forma de charqui. En los lugares donde la madera no era encontrada fácilmente, los incas usaban los excrementos de esos animales como combustible sustituto.

Fueron un pueblo de poca innovación, pero supieron usar los conocimientos adquiridos de otras culturas y los perfeccionaron. No tenían la costumbre de usar hierro, pero hacían mucho uso de oro, plata, cobre y fabricaban bronce. El Templo del Sol (Qorikancha), a ejemplo, fue hecho solamente con piedras y masilla (una forma de petróleo usada en impermeabilizaciones) y sus puertas eran revestidas de oro. El jardín del templo tenía toda su vegetación artificial – hecha de oro – y allá se encontraban alrededor de veinte llamas en tamaño natural, también esculpidas con ese metal precioso.
Alpaca

Al que se parece, no tuvieron escrita, por lo tanto, sus conocimientos solo se hacían por transmisión oral. Apreciaban la música y la poesía amorosa y melancólica, que tenía textos cortos, los cuales hablaban de la soledad durante la ausencia del ser amado, del hombre que ama sin esperanza, de nostalgia y de la inflexibilidad del destino.

Con la muerte de Huayna Capac, sus hijos Huascar y Atahualpa empezaron la llamada Guerra de los dos Hermanos, en búsqueda de la sucesión del imperio. Atahualpa derrotó a su hermano, pero el Imperio Inca, desgastado desde el gobierno de su padre, quedó más debilitado, facilitando su tomada por los españoles.
Atrapado por Francisco Pizzarro, Atahualpa rechazó convertirse al cristianismo y eso, juntamente con acusaciones de doce crímenes, resultó en su muerte. Su otro hermano, Toparca, le sucedió en el gobierno, pero murió inesperadamente. El Imperio Inca, aún que no completamente tomado por los españoles, perdió toda la organización que tenía y vio morir gran parte de su población debido a las enfermedades traídas de Europa por los españoles. Hoy día, alrededor de mitad de la población de Perú aún usa el idioma quechua.

En ese video se puede asistir parte de un documentario sobre esa civilización grandiosa: